miércoles, 27 de junio de 2012
Lo que se queda...
Cuando pienses que sobras, que nadie te quiere al lado... Piensa en mi.
Cuando te creas lo peor del mundo, y termines hundiéndote... Ahí estaré yo.
Si fracasas en algo y te quieres dar por vencido... Será cuando más confíe en ti, porque sé que no te rendirás.
Si el mundo se pone de acuerdo para darte de lado... No te preocupes, yo seré lo que queda, lo que estará ahí siempre para ti.
Sé que lo sabes, pero quiero que lo vuelvas a recordar.
Amor, que yo seré la que nunca se irá. La que intentará cuidarte lo mejor que pueda. La que te tenderá la mano para levantarte y después un hombro para caminar. Yo seré la que te ayude a llegar a la meta de todo, porque ¿sabes? Si ti yo tampoco podría. Yo seré la que te anime cuando decaigas. No sé como, porque nunca sé como lo hago, pero lo haré aún sin saberlo.
Yo seré la que te saque una sonrisa cada día. La que te despierte despierte con un beso de buenos días, o la que se hará la dormida cuando vengas tú a despertarme.
Yo estaré ahí siempre. Yo te haré feliz. Yo te amo.
Sorpresa.
Cuando te sorprenden:
-Las cejas se levantan y se convierten en curvas y altas.
-Se estira la piel de debajo de las rodillas.
-Se cae la mandíbula sin tensión.
-Se te acelera el corazón.
Pero, también hay tipos de sorpresas:
-Neutrales.
-Agradables.
-Desagradables.
Yo, sinceramente, soy partidaria de las que son capaces de conseguirte una sonrisa. Creo que son las mejores, y las que tú te mereces, por eso tengo la manía de no decirte cuando escribo aquí, porque me gusta que te sorprendas al verlo y veas que hay algo, en este pequeño rinconcito, para ti. <3
jueves, 21 de junio de 2012
Zero
Sonó la alarma a las 9 para irse a hacer deporte como de costumbre, aunque ese día no iría. De todas formas, no la pilló durmiendo, pues llevaba despierta un buen rato. No era insomnio, si no nervios.
Era el día, por fin había llegado y a la cuenta atrás solo le quedaban como mucho algunas horas. No lo podía creer...
Se levanta y baja a desayunar, aunque, a causa de los nervios no tenía muchas ganas. Después arregla su habitación y, a medida que pasaba el tiempo, se ponía más nerviosa, eufórica y sentía que de un momento a otro le iba a dar un ataque al corazón. Sus latidos eran acelerados y fuertes, pero se le oía pensar: "Dios... Hoy le veo, hoy le veo, hoy le veo... asdfbkausybdfhasf. ¿Le gustaré?¿Le gustaré también a su familia?¿Y si la cago?¿Y si me tomo un tranquilizante o me sedan o algo?"
La pobre chica ya no sabía que hacer para pasar el tiempo y para calmar sus nervios. Estaba demasiado nerviosa como para hacer nada, así que se puso a cantar.
Empezó a cantar su canción porque quería cantársela a él después, esperando ver en su rostro asombro y orgullo por ella.
Así pasa la mañana, de un lado a otro sin saber que hacer. Le entraron ganas de pasear pero, sabía que en cuanto se fuera él llegaría, y ella era demasiado gafe como para que eso no pasara.
Subió arriba, a su habitación y se puso en el balcón, jugando con su perra, esperando a que llegara.
Ve coches pasar, todos desconocidos, hasta que uno se para justo en la puerta de su casa y la perra empieza a ladrarles.
La chica, toca atacada, pensó: "¿Será él? Joder que me da algo kajsdhmfbkasjhdbfm Pusa, cállate coño."
Baja las escaleras atropelladamente y se coloca justo delante de la puerta. En esas, suena que llaman. La chica espera unos segundos y... abre.
Era él, enfrente de ella, que había tocado a la puerta, tal y como acordaron. No se lo podían creer... Su sueño estaba justo delante de ellos.
El acuerdo no acababa sólo ahí, así que tal como prometieron, se abrazaron intensamente y después, se besaron. Fundieron sus labios en los del otro.
Fue el primer beso. El primero de muchos llenos de amor. El primero de una vida entera llena de ellos.
Era el día, por fin había llegado y a la cuenta atrás solo le quedaban como mucho algunas horas. No lo podía creer...
Se levanta y baja a desayunar, aunque, a causa de los nervios no tenía muchas ganas. Después arregla su habitación y, a medida que pasaba el tiempo, se ponía más nerviosa, eufórica y sentía que de un momento a otro le iba a dar un ataque al corazón. Sus latidos eran acelerados y fuertes, pero se le oía pensar: "Dios... Hoy le veo, hoy le veo, hoy le veo... asdfbkausybdfhasf. ¿Le gustaré?¿Le gustaré también a su familia?¿Y si la cago?¿Y si me tomo un tranquilizante o me sedan o algo?"
La pobre chica ya no sabía que hacer para pasar el tiempo y para calmar sus nervios. Estaba demasiado nerviosa como para hacer nada, así que se puso a cantar.
Empezó a cantar su canción porque quería cantársela a él después, esperando ver en su rostro asombro y orgullo por ella.
Así pasa la mañana, de un lado a otro sin saber que hacer. Le entraron ganas de pasear pero, sabía que en cuanto se fuera él llegaría, y ella era demasiado gafe como para que eso no pasara.
Subió arriba, a su habitación y se puso en el balcón, jugando con su perra, esperando a que llegara.
Ve coches pasar, todos desconocidos, hasta que uno se para justo en la puerta de su casa y la perra empieza a ladrarles.
La chica, toca atacada, pensó: "¿Será él? Joder que me da algo kajsdhmfbkasjhdbfm Pusa, cállate coño."
Baja las escaleras atropelladamente y se coloca justo delante de la puerta. En esas, suena que llaman. La chica espera unos segundos y... abre.
Era él, enfrente de ella, que había tocado a la puerta, tal y como acordaron. No se lo podían creer... Su sueño estaba justo delante de ellos.
El acuerdo no acababa sólo ahí, así que tal como prometieron, se abrazaron intensamente y después, se besaron. Fundieron sus labios en los del otro.
Fue el primer beso. El primero de muchos llenos de amor. El primero de una vida entera llena de ellos.
martes, 19 de junio de 2012
El pequeño gatito
Esto era una vez un pequeño gatito, que nació de una camadita de gatitos blancos y él era el único que tenía dos penes. Ellos lo discriminaron por ello, así que probó a irse de casa, pero las vergas bidireccionales no le dejaban salir por la puerta, así que salió por la ventana.
La verdad es que le fue bien. Se metió a la industria del porno. Ya ves tú, con dos pingas, ¿A donde irías? Bueno...
El gatito empezó a crecer y a crecer y se convirtió en un gato macho fuerte y bien dotado. Pero, no todo le iba a ir bien a este gato, porque en todo cuento, si no pasa algo malo, sería un auténtico coñazo.
Estaba el gatito hombre ahí, rodando la peli con dos lumi-gatis para él dándoles PIM PAM TOMALACASITOS a las dos a la vez, porque se lo podía permitir, cuando sonó un crujido... Era su pene derecho, y se lo había roto... Al pobre le operaron pero, ya nada volvió a ser lo mismo... Le despidieron del único trabajo que sabía hacer y esta vez si que pudo salir por la puerta.
Cayó en una profunda depresión, empezó a vagabundear y todo el mundo lo trataba de monstruo. Se acabó suicidando, y hoy, es el aniversario de su muerte.
Te pregutarás porque sé esta historia y es que, en una de sus pelis porno, algo más salió mal y dejó embarazada a una de las lumi-gatis, de la cual salió una gatita muy bonita, pero con mucha mala hostia. Está poseída por el espíritu del pene roto y de ahí su nombre, Naome.
La verdad es que le fue bien. Se metió a la industria del porno. Ya ves tú, con dos pingas, ¿A donde irías? Bueno...
El gatito empezó a crecer y a crecer y se convirtió en un gato macho fuerte y bien dotado. Pero, no todo le iba a ir bien a este gato, porque en todo cuento, si no pasa algo malo, sería un auténtico coñazo.
Estaba el gatito hombre ahí, rodando la peli con dos lumi-gatis para él dándoles PIM PAM TOMALACASITOS a las dos a la vez, porque se lo podía permitir, cuando sonó un crujido... Era su pene derecho, y se lo había roto... Al pobre le operaron pero, ya nada volvió a ser lo mismo... Le despidieron del único trabajo que sabía hacer y esta vez si que pudo salir por la puerta.
Cayó en una profunda depresión, empezó a vagabundear y todo el mundo lo trataba de monstruo. Se acabó suicidando, y hoy, es el aniversario de su muerte.
Te pregutarás porque sé esta historia y es que, en una de sus pelis porno, algo más salió mal y dejó embarazada a una de las lumi-gatis, de la cual salió una gatita muy bonita, pero con mucha mala hostia. Está poseída por el espíritu del pene roto y de ahí su nombre, Naome.
domingo, 17 de junio de 2012
¿Qué pasa?
No lo entiendo, en serio. ¿Qué pasa?¿Qué nos está pasando?¿Esto es todo?
Sinceramente, no sé como lo hemos hecho pero... A veces siento que nos estamos perdiendo.
Tengo miedo de que eso pase porque tú eres todo lo que me queda... Y no soy capaz de escribir esto sin que las lágrimas recorran mis rostro y se estrellen con lo primero que toquen hasta el punto de no ser capaz de ver lo que escribo.
Te amo, lo sabes, y te lo intento demostrar lo mejor que puedo pero... También quiero recibir lo que me merezco... Y no es que tú no me des nada pero, las veces que te digo que yo te amo más, te lo digo pensándolo de verdad...
No sé que nos está pasando, pero de los dos depende que cambie si queremos hacer realidad nuestro F&A.
Ni si quiera sé si verás esto... Y aunque no lo veas, sé que mañana probablemente me arrepentiré de escribirlo, pero... Es lo que siento ahora y es como me siento. Quiero que se quede aquí por si lo ves, que pienses y te acuerdes de esto... Sé que puede parecer cruel pero necesito que esto no vuelva a pasar...
Te amo pero... Ya no estoy segura de poder decirte que no me acabaré cansando con estas cosas...
No te canses por favor...
Sinceramente, no sé como lo hemos hecho pero... A veces siento que nos estamos perdiendo.
Tengo miedo de que eso pase porque tú eres todo lo que me queda... Y no soy capaz de escribir esto sin que las lágrimas recorran mis rostro y se estrellen con lo primero que toquen hasta el punto de no ser capaz de ver lo que escribo.
Te amo, lo sabes, y te lo intento demostrar lo mejor que puedo pero... También quiero recibir lo que me merezco... Y no es que tú no me des nada pero, las veces que te digo que yo te amo más, te lo digo pensándolo de verdad...
No sé que nos está pasando, pero de los dos depende que cambie si queremos hacer realidad nuestro F&A.
Ni si quiera sé si verás esto... Y aunque no lo veas, sé que mañana probablemente me arrepentiré de escribirlo, pero... Es lo que siento ahora y es como me siento. Quiero que se quede aquí por si lo ves, que pienses y te acuerdes de esto... Sé que puede parecer cruel pero necesito que esto no vuelva a pasar...
Te amo pero... Ya no estoy segura de poder decirte que no me acabaré cansando con estas cosas...
No te canses por favor...
lunes, 4 de junio de 2012
Decayendo...
Hoy, me levanté pensando en él y en el verano que imaginamos juntos. Lo hice feliz y con la ilusión y las ganas de volver a hablar con él otra vez.
Repasé un poco antes de ir al instituto y cuando terminé, me fui.
Llegué. Tocaba Francés y, siendo el cumpleaños de una amiga, le di el dibujo que tanto esfuerzo me costó. Me gratificó bastante que le gustara tanto, la verdad... También aproveché para repasar en esa hora, sin hacer apenas caso de lo que decía Ana, la profesora.
Después tocaba Griego, la asignatura con el examen y... Salí bastante contenta porque me salió bastante bien.
En fin, después recreo, y las demás clases... Siempre pendiente del móvil por si él aparecía y poder contestarle rápido.
Nada...
En la última hora, Historia, me aliviaron un poco la semana porque cambiaron el examen a la semana que viene, así que tendría mas tiempo para hacer los trabajos, estudiar y todo eso.
Antes de llegar a casa, pasé a casa de una compañera, porque me dejó unos palos para el examen de mañana de E.F. y me fui tan contenta a mi casa por haberlos conseguido.
A partir de aquí, todo fue a peor...
Después de comer, descansé 15 minutos porque estaba muy cansada, y después de eso, empecé con los palos, con ánimo y ganas.
A medida que se me caían los palos, se caía mi esfuerzo, mis ganas, mi ánimo... y más tarde, mis lágrimas.
Esos palos... significan otra prueba que he de superar para conseguir nuestro verano, pero cada vez veía más difícil el controlarlos, y me imaginaba en el examen, moviéndolos como una idiota y cayéndose todo el rato, con un suspenso asegurado.
Deprimida y ya por la tarde, fui a por el ordenador para estudiar, pero por la poca falta de cooperación de Internet, se me acabó la paciencia bien rápido y me empecé a estresar, a cabrear y a llorar como una idiota. Porque no sólo no me salían los trucos con los palos, si no que tampoco podía estudiar... Como si me lo pudiera permitir.
No funcionándome nada, y ya harta, me empecé a desahogar por Twitter, que lo único que iba era poner yo tweets, y ya está. Solo eso.
Agotada mi paciencia, probé suerte con los palos otra vez. Pero esta vez, cabreada, sin ver una mierda por culpa de las lágrimas, sintiéndome sola por llevar todo el día sin poder hablar con él...
Cuando empecé, no veía los palos con las lágrimas. No acertaba a darles, y mucho menos a hacer trucos con esa mierda.
Terminé sentándome en el suelo abrazando mis rodillas y llorando desconsoladamente, con los palos al lado, tirados en el suelo y viendo muy lejos nuestro verano...
Tanta es la lástima que daba, que hasta mi perra se acercó a mi con cara de pena, con ojos de "No llores" y dándome besitos... Por lo que lloré más aún...
La puta impotencia de no ser capaz de hacer nada más, de esforzarme y no ser suficiente, y de las lágrimas tan amargas que tenía, me dieron ganas de romper los palos... Pero no eran míos, así que me controlé... Tampoco podía hacerlo con el ordenador... Así probé a reiniciarlo por cuarta vez, para que ojalá me fuera Internet... y trasteando, no sé que hice que solucioné un poco el problema de conexión.
Ahora... ahora estoy asimilando mi suspenso de mañana, intentando calmarme y, ya que me funciona Internet, escribiendo esta mierda, porque es mierda, a modo de desahogo.
Lo único bueno es que por lo menos, ahora puedo hablar con él... Pero tengo miedo de llevarle hasta mi estado de ánimo...
No sé que será de mi... ¿Como estaré esta noche...? Me da miedo pensarlo, la verdad...
Repasé un poco antes de ir al instituto y cuando terminé, me fui.
Llegué. Tocaba Francés y, siendo el cumpleaños de una amiga, le di el dibujo que tanto esfuerzo me costó. Me gratificó bastante que le gustara tanto, la verdad... También aproveché para repasar en esa hora, sin hacer apenas caso de lo que decía Ana, la profesora.
Después tocaba Griego, la asignatura con el examen y... Salí bastante contenta porque me salió bastante bien.
En fin, después recreo, y las demás clases... Siempre pendiente del móvil por si él aparecía y poder contestarle rápido.
Nada...
En la última hora, Historia, me aliviaron un poco la semana porque cambiaron el examen a la semana que viene, así que tendría mas tiempo para hacer los trabajos, estudiar y todo eso.
Antes de llegar a casa, pasé a casa de una compañera, porque me dejó unos palos para el examen de mañana de E.F. y me fui tan contenta a mi casa por haberlos conseguido.
A partir de aquí, todo fue a peor...
Después de comer, descansé 15 minutos porque estaba muy cansada, y después de eso, empecé con los palos, con ánimo y ganas.
A medida que se me caían los palos, se caía mi esfuerzo, mis ganas, mi ánimo... y más tarde, mis lágrimas.
Esos palos... significan otra prueba que he de superar para conseguir nuestro verano, pero cada vez veía más difícil el controlarlos, y me imaginaba en el examen, moviéndolos como una idiota y cayéndose todo el rato, con un suspenso asegurado.
Deprimida y ya por la tarde, fui a por el ordenador para estudiar, pero por la poca falta de cooperación de Internet, se me acabó la paciencia bien rápido y me empecé a estresar, a cabrear y a llorar como una idiota. Porque no sólo no me salían los trucos con los palos, si no que tampoco podía estudiar... Como si me lo pudiera permitir.
No funcionándome nada, y ya harta, me empecé a desahogar por Twitter, que lo único que iba era poner yo tweets, y ya está. Solo eso.
Agotada mi paciencia, probé suerte con los palos otra vez. Pero esta vez, cabreada, sin ver una mierda por culpa de las lágrimas, sintiéndome sola por llevar todo el día sin poder hablar con él...
Cuando empecé, no veía los palos con las lágrimas. No acertaba a darles, y mucho menos a hacer trucos con esa mierda.
Terminé sentándome en el suelo abrazando mis rodillas y llorando desconsoladamente, con los palos al lado, tirados en el suelo y viendo muy lejos nuestro verano...
Tanta es la lástima que daba, que hasta mi perra se acercó a mi con cara de pena, con ojos de "No llores" y dándome besitos... Por lo que lloré más aún...
La puta impotencia de no ser capaz de hacer nada más, de esforzarme y no ser suficiente, y de las lágrimas tan amargas que tenía, me dieron ganas de romper los palos... Pero no eran míos, así que me controlé... Tampoco podía hacerlo con el ordenador... Así probé a reiniciarlo por cuarta vez, para que ojalá me fuera Internet... y trasteando, no sé que hice que solucioné un poco el problema de conexión.
Ahora... ahora estoy asimilando mi suspenso de mañana, intentando calmarme y, ya que me funciona Internet, escribiendo esta mierda, porque es mierda, a modo de desahogo.
Lo único bueno es que por lo menos, ahora puedo hablar con él... Pero tengo miedo de llevarle hasta mi estado de ánimo...
No sé que será de mi... ¿Como estaré esta noche...? Me da miedo pensarlo, la verdad...
Suscribirse a:
Entradas (Atom)